Cuando no respetamos los principios del entrenamiento, podemos estar influyendo en la capacidad de recuperación y adaptación de la persona.
Esta falta de recuperación y adaptación puede dar lugar a un acúmulo de fatiga que, en determinados casos, puede derivar hacia una fatiga crónica o sobreentrenameinto.
El sobreentrenameinto, va a tener una consecuencia clara que es la no recuperación del organismo; lo que va a mermar el rendimiento de la persona.
Este síndrome puede causar en la persona una serie de características como:
-Aumento de la FC basal.
-Disminución del apetito y del peso.
-Inestabilidad emocional.
-Anemia.
-Problemas digestivos.
-..
Como motivos más significativos que pueden llevar a este síndrome de sobreentrenamiento, podemos señalar los siguientes:
-Errores en la planificación del entrenamiento.
-La utilización insuficiente de métodos de recuperación.
-Aumento demasiado rápido de las exigencias de entrenamiento.
-Exceso de cargas de alta intensidad.
-Descuido del entrenamiento invisible; es decir, descuido de la alimentación, del sueño y de los hábitos adecuados.
No cuidar estos aspectos pueden impedir la continuación del entrenamiento; así como derivar en un proceso patológico o lesivo.
